Los profesores del IES. Sácilis, convencidos de la utilidad de la literatura en general, y de la poesía en particular, nos vemos en la necesidad de plantear esta experiencia educativa como un recurso más para abordar la noble tarea que significa impartir clase. Nuestra esperanza es que algo cambie, que nuestro centro se enriquezca con nuevas prácticas, y que lo haga mediante cauces que incentiven día a día nuestro trabajo.
¿Qué pretendemos con EL POEMA DE LA SEMANA?
Fomentar la lectura como uno de los actos que más dignifica al ser humano, apoyando los objetivos del Plan de lectura y biblioteca.
Cambiar, mediante pequeños gestos, el día a día de nuestra labor docente para modificar y mejorar el ámbito en el que trabajamos, recurriendo en este caso a un “arma poderosa”, como es la poesía.
Colocar un poema en la entrada del centro, en un espacio creado para tal fin, además de en otros lugares como pasillos, clases, o en el entorno virtual de las TIC.2: Blog “Poema de la semana”, facebook, instagram...
Romper entre nuestro alumnado y, en general, en toda la comunidad educativa, los prejuicios que se tienen acerca de este género literario: la poesía no es aburrida, ni difícil de leer, ni es un desahogo romántico, o algo cursi...
Mostrar su utilidad real: la poesía sirve para pensar despacio, para aprender a amar las palabras, para atenuar la violencia verbal y conocernos y comunicarnos; sirve para ligar, para sonrojar a un chico o a una chica, para consolar, para regalarla...La poesía es como un inmenso botiquín con toda clase de medicamentos que curan la ansiedad, la soledad, el insomnio, la melancolía, los enfados, las migrañas, los dolores del amor...Nos ayuda a entender mejor nuestros sentimientos y a leer mejor en los demás; a sentirnos rodeados de belleza; a rebelarnos contra el mundo... Además un poema puede leerse a cualquier hora del día o en cualquier lugar: en el café; mientras hacemos el trayecto hacia el instituto o trabajo en coche, bus o tren; esperando en la consulta del doctor o en la oficina de correos; a la hora del almuerzo, la cena; o en la cama, antes de dormir...
Difundir la obra de nuestros poetas contemporáneos y enriquecernos con su mirada sobre el mundo actual, ampliando sus límites y fronteras.
EL POEMA DE LA SEMANA se inicia con la ilusión de que todos los compañeros, padres y madres y, cómo no, todos los alumnos, participen en esta novedosa actividad. Simplemente leyendo los poemas o incluso (¡qué gran éxito sería para nosotros!) proponiendo poemas para su difusión en este espacio o divulgando la existencia del proyecto a través de cualquier cauce. Por tanto, es a la par un lugar de encuentro y un sitio abierto a toda la comunidad educativa del IES. Sácilis.
Sentado en el columpio de la hierba
al viento del verano, sé que existo.
Lo sé junto al reflejo de las ondas
y el celeste rumor de una piscina:
contemplo este papel que me asegura
con etimologías y guarismos
que el fugaz personaje que es mi cuerpo
se empeña en resistir. Yo le doy gracias
por disculparme la temeridad,
los derroches del joven rico en vida
que exprime la naranja de la sangre
como si su precaria fortaleza
en lugar de un regalo fuese un mérito. Agradezco, salud, la armonía del alma
con la carne, su pacto temporal,
el incierto equilibrio –dilatado
como en cámara lenta– que permite
correr y conmoverse, deslizar un capricho
entre dos reflexiones, el amar la palabra
y el amar sin palabras, el temor
de malgastarlo todo en una carretera
y el extraño derecho de arriesgarlo. La salud, que ilumina lo veloz y lo quieto,
la cosquilla y la idea, el músculo y la música,
el malestar, el goce, la costumbre
de quebrar el espejo
y sumergirme
hasta el fondo vivaz de esta piscina
donde un papel repleto de guarismos
ha caído arrugado entre la hierba.
Andrés Neuman
Mística abajo
Acantilado,
Barcelona, 2008
Con este canto al gozo de estar vivos al que Andrés
Neuman titula Oda a la salud
concluimos El poema de la semana de
este curso 2015-2016. Miles de versos y muchísimas ideas de casi todos los que
formamos la pequeña familia de este gran instituto, han desfilado por las páginas
de este blog repartidas en veintiocho poemas, cientos de comentarios y miles de
visitas. Mi gratitud más sincera. Sé bien que numerosísimos versos han prendido
en la inteligencia del lector y también que otros tantos han formado una lumbre
dentro de su corazón. Es la razón de ser de la poesía. Nuestro propósito no era
otro que el de acercar el lenguaje poético (el más pleno y esencial de
cualquier idioma) al alumnado del instituto y por extensión a todas aquellas
personas que de una manera o de otra hayan llegado a él.
Oda a la Salud
es un hermoso poema. La imagen no puede ser más veraniega: sentarse sobre el
césped al lado de una piscina y sentirse vivo y reflexionar acerca de la propia
existencia y hacerlo con alegría es una buena fórmula para exaltar la salud.
Hay que tirarse desde el trampolín y sumergirse bien en estos versos y hay que
bucear en ellos, pausadamente, aguantando la respiración y con los ojos bien
abiertos para encontrarse con los tesoros que encierra. Son físicos y
metafísicos. Hasta el próximo curso. Gracias otra vez.
Gurb
Andrés Neuman. (Buenos Aires, 1977).
Licenciado en Filología Hispánica por la Universidad de Granada, donde ha sido
profesor de literatura hispanoamericana.
Colaborador en diferentes medios
culturales como el suplemento cultural ABCD las artes y las letras del
diario ABC (España), en la Revista Ñ del diario Clarín (Argentina)
y en El País. Su blog Microrréplicas está considerado como uno de los
mejores en lengua española.
Reconocido como
unos de los autores más interesantes de los últimos años, publica a los 22 años
su primera novela, Bariloche (Anagrama, 1999), quedando como Finalista
del Premio Herralde y siendo acogida favorablemente por la crítica. Sus
siguientes novelas fueron La vida en las ventanas (Espasa, 2002,
Finalista del Premio Primavera) y Una vez Argentina (Anagrama, 2003).
Su cuarta novela, El viajero del siglo (Alfaguara, 2009), ha obtenido el
Premio Alfaguara y se publicó simultáneamente en todos los países de habla
hispana. Esta novela fue votada entre las cinco mejores del año en lengua
española por los críticos de El País y El Mundo. Este año ha
recibido, por la misma novela, el Premio de la Crítica Literaria que concedido
cada año por la Asociación Española de Críticos Literarios (AECL) y está
considerado como uno de los galardones literarios más prestigiosos de España.
Es autor de los libros de cuentos El
que espera (Anagrama, 2000), El último minuto (Espasa, 2001) y Alumbramiento
(Páginas de Espuma, 2006). Ha desarrollado una intensa labor de estudio y
divulgación del relato breve. e Pequeñas resistencias, antología en
cuatro volúmenes del cuento actual escrito en español en todo el mundo (Páginas
de Espuma, 2002-2005). También cabe destacar su prólogo a los Cuentos de
amor de locura y de muerte, de Horacio Quiroga (Menoscuarto, 2004).
Como poeta ha publicado Simulacros
(Cuadernos del Vigía, 1998), Métodos de la noche (Hiperión, 1998, Premio
Antonio Carvajal), Alfileres de luz (Universidad de Granada, 1999), El
jugador de billar (Pre-Textos, 2000), El tobogán (Hiperión, 2002,
Premio Hiperión), 'La canción del antílope (Pre-Textos, 2003) y Mística
abajo (Acantilado, 2008), así como la colección de haikus Gotas negras (Plurabelle,
2003) y los Sonetos del extraño (Cuadernos del Vigía, 2007). Todos los
poemarios anteriores, revisados y con dos libros inéditos, han sido reunidos en
el volumen Década. Poesía 1997-2007 (Acantilado, 2008).
Es también autor del libro de aforismos
y microensayos El equilibrista (Acantilado, 2005) y de una traducción
del Viaje de invierno, de Wilhelm Müller (Acantilado, 2003).
Durante 2010-2012 ha publicado varias
novelas, cuentos y poesía, siendo finalista de varios premios literarios. Su
obra está traducida a más de 11 idiomas.
Hace una semana leí Ficciones para una
autobiografía, el último poemario de la cordobesa Ángeles Mora, al que
hace un par de meses le concedieron el Premio Nacional de la Crítica. Me ha
conmovido su ternura, su cotidianidad, la sencillez lírica, tan difícil, con la
que la autora construye cada poema. El aire que se respira en cada verso, la
atmósfera que la autora crea, hace de este libro un lugar hospitalario en el
que uno se puede sentir como en casa. De entre todos he escogido este poema
porque estamos a las puertas del verano y me parecía una buena excusa para
homenajear al cine, en su versión estival. Durante décadas, los cines de verano
han sido la principal posibilidad de ocio,una tradición
popular que tras muchos años de decadencia parece que ahora, afortunadamente, vuelve
a resurgir en muchos pueblos y ciudades, quizás con formas distintas, pero
siempre con la misma filosofía: disfrutar del Séptimo Arte al aire libre, bajo
las estrellas. Una forma de que niños y jóvenes conozcan la magia de los cines
de verano que nos cautivaron a todos, a nuestros padres, a nuestros
abuelos y a nosotros mismos.
El cine de verano es el lugar
donde muchos de nosotros hemos vivido anécdotas imborrables, por lo que
permanecerán en nuestra memoria para siempre. El espléndido poema de esta
semana, Al aire
libre, y la hermosa canción Una de romanos,
del también poeta y cantante Joaquín Sabina, son un ejemplo de ello. Tanto en
el poema como en la canción, como decimos, se cuenta una anécdota, aunque en
cada uno de ellos bien distinta, pues los personajes de los dos textos, con
edades distintas desean, también, distintas cosas. En ambos casos, momentos
imborrables seguro en la vida de sus autores, con la gran pantalla al fondo, y
con ese sonido tan peculiar de las películas al aire libre. En el primero, del
haz de luz polvorienta del proyector sale la imponente imagen de Gary Cooper, leyenda del
cine del Oeste, con quien Ángeles Mora abre (con una cita extraída del título de una película de Pilar Miró) y cierra el poema. Y en el segundo, una
peli de romanos. Las dos son imágenes míticas de los cines de verano de los
años 50 y 60 que yo no pude vivir, pero que gracias a los dos autores puedo
imaginar y sentir como propias aunque solo sea por unos segundos. Bendita sea,
una vez más, la poesía, que nos regala la emoción y la nostalgia de aquello que
jamás nos sucedió.
Gurb
BIOGRAFÍA
Nace en Rute en
1952,
aunque reside en Granada desde hace más de veinte años. Poeta.
Licenciada en
Filología Hispánica por la Universidad de Granada, se la considera una de las
más principales autoras de la poesía de la experiencia. Es Presidenta de la
Asociación de Mujer y Literatura Verso libre, y miembro numerario de la
Academia de Buenas Letras de Granada.
Poemarios
individuales
Pensando que el camino iba derecho (Granada, Genil, 1982).
La canción del olvido (Granada, Diputación, 1985).
La guerra de los treinta años (Premio Rafael Alberti 1989;
Cádiz, Caja de Ahorros, 1990).
Contradicciones, pájaros (Premio Internacional de Poesía
Ciudad de Melilla 2000; Madrid, Visor, 2001).
Traducción al italiano: Contraddizioni, ucelli, Alessandria,
Edizioni dell'Orso, 2005.
Antologías
poéticas
Antología poética (1982-1995) (ed. Luis Muñoz; Granada,
Diputación, 1995).
Ayer, 5 de junio, celebramos el Día Mundial del Medio
Ambiente, y no queríamos dejar pasar
esta oportunidad para dedicar esta semana un poema y una canción para la reflexión,
la concienciación y la sensibilización en nuestro instituto de todos los
problemas medio ambientales que ha provocado el ser humano en las últimas
décadas.
Es evidente que debe de producirse un cambio de actitud
de toda la población mundial con respecto al medio ambiente. Las sociedades
desarrolladas actuales, en las cuales estamos inmersos, tienen un papel
fundamental en la evolución y cambio de actitud para poner las bases en las que
construyamos un mundo más próspero y seguro.
VERDE, el estupendo poema
de Benjamín Prado escogido esta
semana, es un poema de denuncia, incluso podríamos calificarlo como un poema
ecologista. Está lleno de imágenes impactantes, un rasgo habitual en su poesía,
que necesariamente nos llevan a, como hemos apuntado más arriba,la reflexión, la concienciación yla sensibilización. El poema está dividido en
tres partes. En la primera, el poeta maldice a todas aquellas personas que
provocan la destrucción del planeta: a aquellas que propician la desaparición
del lince; aquellas que perpetran ataques continuos contra las selvas y los
bosques y contra el mar, utilizado como un vertedero por las grandes
petroleras; a aquellas que pugnan por el marfil ocasionando la atrocidad de
dejar a cientos de elefantes muertos sin sus atributos más preciados; a aquellas
que lanzan residuos en los ríos; a las que ocultan el sol con la fiebre de la
construcción; a las que cazan ballenas; las que talan los árboles… En la
segunda parte, Benjamín Prado maldice, también, el mundo que están creando quienes
lo destruyen: un mundo sin peces ni madera; un mundo de oxígeno sombrío; de
horizonte de escombros; de amaneceres sin pájaros. Para finalmente ponerles
nombre: enemigos del verde, cómplices de la ciénaga, sicarios de la bruma y hablar de ellos como esa plaga a la
que hay que exterminar en nombre de la vida para salvar el planeta.
Todos sabemos quiénes son los enemigos, los cómplices, los sicarios. Lo que no
sabemos es si alguna vez podremos acabar con ellos, no literalmente, como es
natural, sino de una forma metafórica, barriéndolos de sus empresas, de sus
puestos y de suscargos para salvar así
al planeta.
La poesía sirve para muchas cosas, lo
hemos visto a lo largo del curso. Una de sus funciones, sobre todo a lo largo
del siglo XX, ha sido la de convertirse en una abanderada de la denuncia, el testimonio o la protesta.Este poema es un ejemplo de ello. Esperamos que os haya
gustado. Completamos la entrada con la canción SKA DE LA TIERRA dela artista Bebe. El mensaje es el mismo, pero merece
la pena escucharlo y emocionarse con su sensibilidad. El planeta es el lugar en
el que la humanidad va a pasar el resto de su existencia. Es una afirmación tan
simple que da risa escucharla. Pero la sensación que uno tiene, es que se nos
olvida con mucha frecuencia algo tan sencillo. La Tierra es nuestra casa, y la
estamos convirtiendo en un basurero. Recordemos que el sol sale por el este y
se pone por el oeste. Que viajamos a una velocidad de vértigo a través del
espacio. Que los ríos, los mares, los bosques y todas las especies animales y
vegetales son nuestras compañeras de viaje y que debemos aprender a respetarlas
y a cuidarlas. ¡A veces da tanto miedo la soberbia y el comportamiento del
hombre con respecto a todo lo que tiene a su alrededor! Cambiar las cosas, como
casi siempre, es una cuestión de suma de individualidades. Empieza reciclando
en casa y termina siendo el líder de una empresa cuyo objetivo y mérito
principal es el respeto al planeta y a la vida. No cortes árboles. Abrázalos.
Gurb
BIOGRAFÍA
Benjamín Prado es uno
de los autores más originales de la Literatura española actual. Poeta,
novelista y ocasionalmente ensayista, su trayectoria vital y profesional está
íntimamente ligada al mundo de la música.
Benjamín Prado
(Madrid, 1961) creció entre canciones de Bob Dylan, del que es un consumado
experto. Del maestro de Minessota extrajo el gusto por la palabra precisa. No
tardó en destacar en el difícil y opaco mundo de la poesía y a los veinticinco
años publicó su primer poemario: Un caso
sencillo (1986), en el que ya se atisbaban los primeros rasgos de
su poesía fresca y urbanita que conformarían su sello en el futuro.
La prosa y la poesía
del autor madrileño se han caracterizado por su cercanía casi fronteriza con el
mundo del rock. Tanto en sus poemas como en algunas de sus novelas, el
lenguaje, incluso el ritmo, están marcadamente influenciados por su cultura
musical. Prado ha sabido trazar una sólida trayectoria como poeta y un
prestigio creciente como narrador al que no le tiembla el pulso a la hora de
abordar temas espinosos como la Guerra Civil Española o la Transición
democrática. Ha cultivado también otros géneros literarios como el ensayo, el
cuento y la novela juvenil. Su amistad con músicos como Joaquín Sabina y Coque
Malla le ha llevado a componer canciones y a realizar giras de conciertos que
combinan la poesía y la música.
La producción
literaria de Benjamín Prado abarca una interesante trayectoria poética con
títulos como Cobijo contra la tormenta (1995),
Todos nosotros (1998), el
recopilatorio Ecuador (2002), Iceberg (2002) y Marea humana
(2006). En el campo de la narrativa su irrupción se produjo a mediados de los
90 con Raro (1995) a la que siguió Nunca le des la mano a un pistolero zurdo (1996). Su
prosa cosmopolita de los inicios ha ido dejando paso a un estilo más lírico
patente en novelas como No sólo el fuego
(1999), Mala gente que camina (2006), en
la que aborda los robos de niños durante la época franquista, y Operación Gladio (2010), novela de espías que revisa
el pasado más reciente de la España democrática. Como ensayista sus
aportaciones más destacadas son Siete
maneras de decir manzana (2000), A la sombra
del ángel (2002) dedicada al poeta Rafael Alberti, Los nombres de Antígona
(2001), el ensayo sobre la composición de canciones junto a Sabina Romper una canción (2009). Su obra sido galardonada con
los premios Hiperón de poesía, el XIV Premio Andalucía de Novela y el Premio
Internacional de Poesía Generación del 27 entre otros. Benjamín Prado colabora
en diversos medios de comunicación y ha sido director de la revista Cuadernos hispanoamericanos.